Como parte de la política de Responsabilidad Social Corporativa del Grupo Embamat, cedemos parte de los beneficios de la empresa a acciones que mejoren la vida de las personas. Tal es así que, por tercer año consecutivo hemos realizado una donación al hospital infantil Sant Joan de Déu de Barcelona.
¿Qué tipo de colaboración hemos llevado a cabo esta vez con la donación de Embamat a Sant Joan de Déu?
A finales de marzo, esta donación se ha materializado en la compra de un respirador especial para cubrir las necesidades respiratorias de los más pequeños ingresados en el hospital.
Es un Respirador Servo N con NAVA, de alta frecuencia y humidificador. Está enfocado a pacientes neonatos con dificultades respiratorias. Además, no se trata de cualquier modelo, ya que es uno de los más avanzados del mercado en cuanto a tecnología. Tanto es así que está sustituyendo a los respiradores tradicionales.
Tiene incorporadas todas las modalidades de ventilación de tipo no invasiva (CPAP y BIPAP), ventilación invasiva de tipo tradicional y de alta frecuencia. Por otro lado, tiene una característica que lo hace diferenciarse del resto de respiradores, puesto que se sincroniza con la respiración del neonato mediante el sistema de última generación NAVA.
El coste de la adquisición ha sido de 43 560 € (impuestos incluidos), y el total de este importe ha sido donado por Embamat.

¿Por qué colaboramos con el Hospital Sant Joan de Déu?
Hace unos años, todo el equipo de Embamat participó en una encuesta y fueron todos los empleados quienes decidieron a qué organizaciones se destinaría parte de los beneficios que la empresa pudiera generar.
Una de las causas más apoyadas fue la de ayudar a organismos que consiguieran mejorar el nivel de vida de las personas de nuestro entorno. Y así, Sant Joan de Déu, como hospital referente en pediatría, fue el elegido.
Para nosotros es un orgullo colaborar con una institución hospitalaria como esta, ya que se ayuda directamente a las personas, sin intermediarios. En el Grupo Embamat conocemos las dificultades que atraviesa el sector sanitario tanto en personal como en recursos. De ahí que hayamos querido cooperar nuevamente con este hospital.
Por todo ello, hemos visitado nuevamente el hospital para conocer sus necesidades y continuamos sorprendidos de forma grata. Desde nuestra última visita, el centro ha reforzado la asistencia internacional a pacientes con pocos recursos. Además, ha ampliado la infraestructura del hospital. Es otro motivo para que hayamos querido visitarlo de nuevo.
El respirador que hemos adquirido se ha ubicado en la nueva UCI de neonatos. En esta unidad trabajan más de 200 enfermeros y un total de 25 médicos, cada cuerpo de profesionales en distintos turnos. Agradecemos que nos hayan acompañado en la visita el Dr. Martí Iriondo (Jefe de la UCI de neonatos) y Mª José Troyano, Coordinadora de UCI.
Hemos comprobado de primera mano la infraestructura que se ha creado en la UCI nueva:
- Sala ELEFANTE. Es para cuidados intensivos y, además, donde se ubican las incubadoras de tipo híbrido, así como una zona para tratar la hipotermia de los recién nacidos.
- Sala CANGURO. Para pacientes no tan graves o que se encuentran en proceso de recuperación.

La unidad de cuidados intensivos para neonatos también ha sido creada pensando en los familiares. Dispone de boxes cuádruples por si no existen permisos para el cuidado de los bebés e incluso por otro tipo de motivos.
Teniendo en cuenta la magnífica labor que realiza este centro hospitalario, hemos decidido comprar el respirador que hemos indicado anteriormente. Se trata de un equipo clave que va a facilitar la vida de los sanitarios y, además, va a salvar muchas vidas de recién nacidos. Al ser apto para cualquier tipo de respiración, los profesionales que trabajan en el centro no van a tener que estar adaptando su uso, así como tampoco van a necesitar cambiar de máquina.
Tras visitar la UCI de neonatos, bajamos a la planta especializada en neurología. En 2021 decidimos colaborar también con ellos adquiriendo un equipo Brain Lad, valorado en 12 300 euros, de neurología infantil.
Aparte, pudimos comprobar que el hospital que visitamos también está trabajando con unos tratamientos complementarios que estamos seguros de que darán sus frutos.
En resumen, como parte de la Responsabilidad Social Corporativa del Grupo Embamat seguimos apostando por mejorar la vida de las personas, y haremos todo lo que esté en nuestra mano para conseguirlo.